martes, 8 de septiembre de 2009

3:00AM


Eran las 3:00AM cuando escuché el timbre de mi puerta sonar. Extrañado me acerqué, mientras la duda hacia eco en mi mente al no saber quien estaba tocando a esas horas de la mañana. No soy dado a recibir visitas, así que estaba aún más incógnito ante aquel visitante que se asomaba a mi casa a media madrugada. Cuando me decidí a recibir a quien se encontraba llamando, abrí la puerta, y me dí cuenta de que eras TÚ que llegabas de sorpresa. Una alegría se apoderó de mí mientras nos perdíamos entre besos, abrazos, caricias y pasión, de repente el frío de la noche desapareció, mientras nos envolvíamos en el fuego de nuestro inmensurable amor. Te invité a pasar y nos sentamos en los muebles a charlar, pues hace rato que no te veía y teníamos mucho de que hablar. Pero el sueño empezaba a jugarme sucio y me fui quedando dormido en el sofá. Cuando abrí los ojos ya no estabas en la silla donde te habías sentado, así que como niño perdido en el mercado te busqué por todos los rincones y no te encontré. Allí me dí cuenta que sólo era un sueño, pero lo nuestro es toda una realidad.

ChaGuiTo!!

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